Editorial

Nuestra revista celebra, una vez más, el aniversario de nuestro Partido en un momento complejo y turbulento para el país. Son 85 años y Acción Nacional sigue siendo la última trinchera de la libertad y de la democracia en México. Conmemoramos nuestra historia reconociendo el ayer y cada hito que nos hizo fuertes, confirmando que nuestro deber en Acción Nacional es permanente y más necesario que nunca.

Se termina el gobierno del engaño y la manipulación con graves retrocesos en materia de salud, Estado de Derecho, democracia y contrapesos de poder, una administración que se caracterizó por la intolerancia y la simulación, mientras la violencia, la corrupción y el fracaso marcaron cada uno de los días del sexenio de López Obrador.

El cierre de sexenio está marcado por el sometimiento y destrucción al Poder Judicial, por la sed de venganza y el autoritarismo característico del presidente saliente, y así impusieron de forma atropellada una reforma constitucional ilegal e ilegítima.

Se entrevista a Luis Nava, alcalde de Querétaro, que termina una administración exitosa y de la que todo panista debería estar orgulloso. Sus resultados son la principal razón de que Acción Nacional se refrende en Querétaro con una gran diferencia de votos en favor de nuestro amigo Felifer Macías. También en temas de nuestro Partido, por el aniversario, estamos iniciando una nueva sección de Identidad Panista en la revista.

En este número aprovecho para hacer un balance final de los seis años que tuve oportunidad de dirigir Acción Nacional. Es claro que a pesar de todas las adversidades se entrega una institución en unidad que supo resistir y sigue siendo la principal oposición de nuestro país.

Agradezco de todo corazón a cada uno de nuestros militantes y a cada mexicana y mexicano que no bajó la voz, que no se rindió y que trabajó por que nuestro país siga siendo libre y democrático. Agradezco a todas y todos los que me dieron oportunidad de ser su dirigente y que apostaron por Acción Nacional y son parte de nuestra brega de eternidad.

Durante estos seis años enfrentamos escenarios muy complicados y tomamos como institución decisiones difíciles. El tiempo juzgará y será la historia la que ponga cada cosa en su lugar. En lo personal me voy convencido de que cada coalición, cada causa y cada candidatura fueron las mejores opciones que en ese momento debimos presentar.

Al concluir mi etapa como presidente de Acción Nacional te aseguro que mi compromiso con México y con el PAN siguen intactos. Con gratitud y convicción te recuerdo que siempre sigo a tus órdenes como compañeros de nuestro Partido.

Marko Cortés Mendoza

Presidente del Comité Ejecutivo Nacional