Una vida de aplicar la doctrina y principios del PAN

Víctor Guerrero González

Abril 2023

Andrés Castro Cid

La Nación

Según yo, la política es crear un ambiente de respeto, de libertad y de justicia, para que todo hombre y toda mujer, en el ejercicio de su libre albedrío, encuentre su destino temporal y eterno en su tránsito por este mundo, así describió don Víctor Guerrero González, militante de Acción Nacional, el fin de toda acción política en la sociedad.

Don Víctor Guerrero es un hombre de ideas claras, defensor de sus creencias políticas y religiosas que, durante nuestra conversación, dejó en claro que fueron su punta de lanza a través de su intensa actividad al interior del Partido. Don Víctor es un hombre con una impresionante historia en el PAN del Estado de México, por lo que La Nación lo visitó para que nos contara su historia.

Don Víctor Guerrero González nació el 23 de marzo de 1929, originario de un municipio llamado Acaponeta, en Nayarit, y la forma en que ingresó al PAN fue que, al pertenecer a una institución católica, la Asociación Católica de la Juventud Mexicana de Vanguardia, conoció a distinguidos líderes de Acción Nacional.

En una ocasión, indicó, José González Torres acudió a Tepic para dar algunas pláticas y allí lo conoció, al igual que a don Efraín González Luna. Años después, ya en Chimalhuacán, Estado de México, en el grupo de la Acción Católica conoció a los Vicencio, Astolfo, su hermano Abel y otro hermano, también al doctor José González Torres, a Velasco Zimbrón y al grandote de Tacubaya, Ituarte Servín.

Destacó que, en una ocasión, en el grupo Acción Católica, comentaron que asistiría un licenciado a dar una plática de un partido político, “supe que vendría José González Torres y fui para saludarlo, porque ya nos habíamos conocido”.

Al tomar la palabra, destacó, entre un regaño y un mensaje a los presentes, ahí se encontraban Velasco Zimbrón y José González Torres, parados detrás. Pepe González Torres, después de platicar con él, me propuso encabezar al PAN en el Estado de México.

“Acepté, entré al PAN con la plena convicción de lo que es la política, desde el punto de vista filosófico y teológico según yo, y la política es crear un ambiente de respeto, de libertad y de justicia para que todo hombre y toda mujer, en el ejercicio de su libre albedrío, encuentre su destino temporal y eterno en su tránsito por este mundo”, aseguró don Víctor.

La actitud humanista del Partido Acción Nacional, en 11 palabras, cuando definimos a la persona, decimos que el ser humano es persona con cuerpo material y alma espiritual, estamos delante de una trascendencia temporal y eterna, pero, además, aseguró don Víctor, estamos aceptando tácitamente los derechos primigenios, inalienables del ser humano que son el derecho a la vida, a la libertad y a la justicia.

Con una gran claridad y precisión de los conceptos filosóficos y teológicos de lo que significa la política y las obligaciones democráticas del ser humano, don Víctor además explicó que el voto es una potestad conferida por el señor de los pueblos, que es Dios, se crea en él o no, y debe nacer del corazón, de la mente y del alma, porque se trata de un giro semejante como gobernante de un pueblo y cuando el voto nace de la vendimia, de la ignorancia y de la cobardía, el que lo recibe ya lleva de por sí el hecho de ser mal gobernante, esto es la gravedad.

Cuestionado sobre sus actividades al interior de Acción Nacional, destacó que trató de participar en todo lo que se pudo. En un principio, al visitar a José González Torres a un despacho que él tenía, le encomendó ser el jefe regional del Partido Acción Nacional del Estado de México.

“En enero del 60 me dijo: tú eres el jefe regional, no hubo documentación, no hubo nada por el estilo, por eso no hay historia de esos cuatro años. En el Partido se dice que yo fui, empecé a hacer la historia del Partido en el Estado de México, es muy buena historia, yo me dediqué a formar el Partido orgánicamente en los nueve distritos electorales federales que había en el Estado de México”.

Agregó que formó un comité regional del Estado de México y después se establecieron los comités distritales y ya en la campaña de “Pepe” (José Gonzàlez Torres) se participó con los nueve candidatos a diputados federales en el Estado de México y los dos candidatos al Senado de la República.

En ese momento, resaltó, el PAN participó en campaña, fue cuando el Partido surge orgánicamente en el Estado de México, en 1964, y el gobierno del Estado de México empezó la persecución y bueno, pues Dios tiene sus planes y me tocó conocer a aquellas personas en la época de estudiantes, a Carlos Hank González lo conocí de huaraches y a otros varios que fueron gobernadores, por eso a mí no me hacían nada.

Al hablar de las personas que más admira de Acción Nacional, don Víctor Guerrero afirmó que uno es Rafael Preciado Hernández, un hombre casi místico, Ituarte Servín, a quien yo conocí en la Acción Católica, a González Torres y, desde luego, a los fundadores del PAN, a don Efraín González, a Manuel Gómez Morin, quien tuvo la idea luminosa para crear un partido, una institución inmediata, superior del tejido social.

Don Víctor Guerrero aseguró que hoy uno de los retos que tiene el Partido es que los estatutos y el reglamento dicen que el Comité Nacional, los estatales y los municipales deben hacer, cuando menos, asambleas dos veces al año, “¿cuántas han hecho ahora?, el Partido ha abandonado el camino y tenemos que ir formando la conciencia de la patria, de la nación y dejaron la patria después y ya lo olvidamos”.

La nación