Defendemos la dignidad, libertad y los derechos humanos

Noviembre 2024

Andrés Castro Cid

La Nación

“La defensa de la dignidad, la libertad y los derechos humanos de las personas en América Latina es muy importante y difícil. Somos víctimas de quienes llegan al gobierno por medios democráticos para destruir la democracia, la democracia liberal y el Estado de derecho”, aseguró Miguel Ángel Rodríguez Echeverría, ex presidente de Costa Rica.

Añadió que este tipo de gobiernos también destruyen la democracia que respeta la división de poderes, la libertad de prensa, la independencia judicial, el debido proceso, la revisión judicial de las actuaciones administrativas, destruyen la democracia que permite que haya prosperidad, por eso es tan importante el Foro América Libre.

De igual forma, el ex mandatario destacó la importancia de que se haya logrado un segundo foro América Libre, pues es síntoma de que hay un compromiso de verdad, una continuidad, una perseverancia porque todo mundo sabe la importancia de la lucha.

Además, Rodríguez Echeverría subrayó que hay un compromiso con el futuro, con el gobierno de Edmundo González en Venezuela, con la libertad de los más de 3 mil presos políticos en América Latina, más de dos mil en Venezuela, de mil en Cuba y los de Nicaragua, de Bolivia, porque tiene que seguir la lucha y esta lucha tiene que ir, como dice María Corina, hasta el final.

Tras aceptar su respeto al pensamiento de una izquierda democrática en el mundo, Miguel Ángel Rodríguez señaló que lo que no es aceptable es el surgimiento de una izquierda que convive con las dictaduras, que idolatra la dictadura de los Castro en Cuba, que ha hecho un héroe al Che Guevara, esa izquierda está mal.

“La izquierda que no es comprometida con la democracia y con la libertad está muy mal. Una izquierda democrática tiene que estar unida con todos los demás, con todos nosotros luchando por la democracia. Es la hora de la lucha entre demócratas y autócratas”.

Por último, el ex presidente de Costa Rica informó que los partidos y líderes demócratas deben defender la dignidad y la libertad de las personas con unidad, se deben interpretar los sentimientos de los ciudadanos y ofrecer verdaderas soluciones, no soluciones ineficientes.

La nación