Meméxico lindo y…

Diciembre 2024

Sergio Rodríguez Colín

La Nación

La llegada de Claudia Sheinbaum a la Presidencia de la República no ha cambiado en nada la crisis de inseguridad y violencia que se vive en todo el país. Al contrario, ha mostrado un aumento en esta materia en estados como Sinaloa, Guerrero y Chiapas, a lo cual se suma la muerte de periodistas y funcionarios públicos que no ceden a las exigencias de los grupos delincuenciales.

Lo anterior es el resultado de la relación del partido Morena con el crimen organizado, vínculo que le ha valido al partido oficialista triunfos electorales en entidades que nunca pensaron gobernar. A estos estados han llegado personas de poca o nula honorabilidad como Rubén Rocha Moya, Américo Villarreal Anaya o Evelyn Salgado Pineda, entre otras.

Al primero, Rubén Rocha, gobernador de Sinaloa, se le señala de estar vinculado con el capo de capos, en la entidad se asegura que él llegó al poder gracias al narcotraficante Ismael “El Mayo” Zambada, y ser el culpable directo de que esta localidad lleve 89 días en guerra, la cual es protagonizada por los llamados “chapitos” y los seguidores de “El Mayo”.

Hasta ahora, en estos 89 días, dicho conflicto ha dejado en Sinaloa más de 200 muertos y graves daños a la economía local, al grado que un grupo de empresarios sinaloenses acudió a la Ciudad de México para reunirse con autoridades federales en busca de una solución. Y mientras el gobernador se la pasa culpando de esta creciente ola de violencia al pasado.

De Américo Villarreal se dice que está al frente de la administración estatal gracias al apoyo que recibió del Cártel del Golfo. También se relaciona a funcionarios de su gobierno con el secuestro y asesinato de migrantes originarios de Venezuela, Colombia, Honduras y hasta de México. Aquí el punto rojo está en la participación del Cártel del Golfo en la toma de decisiones de la administración estatal.

Hijo de tigre pintito. Evelyn Salgado tiene un historial de violencia y caciquismo gracias a su padre Félix Salgado Macedonio, que dicen es quien en realidad gobierna el estado de Guerrero. En apenas tres años de su gobierno la cifra de asesinatos de personajes relacionados con el ámbito político es alarmante, pues durante este tiempo son ya 32 las personas que han sido ultimadas por la delincuencia organizada.

Podríamos seguir escribiendo de las relaciones de estos gobernadores morenistas con el crimen organizado, pero lo realmente importante de esta situación es el nexo entre Morena y los grupos delictivos, en donde sólo los delincuentes han obtenido logros significativos, como la expansión de sus dominios y la intromisión en la política y las decisiones clave para el futuro de México. ¿Nos encaminamos a un narco-estado o ya lo somos?