Manuel Bartlett, político vinculado al narcotráfico y la corrupción

El viernes 15 de agosto, en un operativo por demás sospechoso, elementos de la Secretaría de Marina capturaron al narcotraficante, Rafael Caro Quintero, en la sierra de Chihuahua. Esta segunda captura del ex líder del Cartel de Guadalajara ocurrió días después de que el presidente López Obrador se reuniera con su homólogo estadunidense Joe Biden.

Las autoridades de justicia de Estados Unidos acusan al capo sinaloense de secuestrar, torturar y matar al agente de la DEA, Enrique Camarena, quien en la década de los años 80 investigaba el trasiego de drogas al vecino país del norte por miembros del Cartel de Guadalajara.

Tras la captura del narcotraficante, el gobierno americano solicitó a nuestro país la extradición inmediata de Caro Quintero, con el propósito de juzgarlo por la muerte del agente de la DEA y el tráfico de drogas. Sin embargo, el 26 de julio una jueza federal le otorgó una suspensión provisional para frenar la orden de aprehensión con fines de extradición a Estados Unidos y la orden de reaprehensión en su contra.

Con dicha suspensión se frena lo que a todas luces sería el juicio del año, pues se espera que el narcotraficante hable y proporcione nombres de políticos mexicanos que estuvieron o están involucrados con los carteles de la droga, ya sea en la época de los años 80 o en la actualidad.

Uno de los personajes que más notoriedad ha tenido con esta detención es el actual director de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Manuel Bartlett, quien en aquel tiempo se desempeñaba como secretario de Gobernación durante la presidencia de Miguel de la Madrid.

Investigaciones estadunidenses señalan a Manuel Bartlett como uno de los participantes en el interrogatorio a Enrique Camarena, además de que testigos protegidos aseguran que el hoy titular de la CFE recibió millones de pesos del Cartel de Guadalajara.

De hecho, el ex gobernador de Puebla tiene abierta una carpeta de investigación en Estados Unidos por la muerte del agente de la DEA, por lo cual no puede pisar tierra estadunidense. El probable juicio a Rafael Caro Quintero en el vecino país del norte podría dar luz a la acusación hecha por agentes de la DEA y testigos protegidos en torno a la intervención del político poblano.

El nombre del director de la CFE también ha sido vinculado al homicidio del periodista Manuel Buendía, además de que en meses recientes se dio a conocer que es poseedor de una gran fortuna y dueño de 25 residencias de lujo, además de que permitió que su hijo, León Manuel Bartlett, vendiera al gobierno morenista ventiladores a sobreprecio en plena pandemia.

Cartel carbonífero

En su columna “Estrictamente Personal” del periódico El Financiero, el periodista Raymundo Riva Palacio desvela la operación que el director de la CFE, Manuel Bartlett, llevó a cabo en la región carbonífera de Coahuila, en donde eliminó la intervención del gobierno estatal en la compra del carbón y estableció una relación directa con los productores.

“Bartlett había dicho que la Promotora para el Desarrollo Minero de Coahuila (Prodemi) desaparecería porque era corrupta, pero lo que provocó fue una corrupción generalizada. Los pequeños productores terminaron revendiendo el carbón a los grandes productores a pie de pozo, quienes, a su vez, se lo revendían a la CFE a mayor costo.

Asimismo, el articulista pone de manifiesto como el director de la CFE ha entregado contratos millonarios a personajes como Tania Flores, actual alcaldesa por Morena de Múzquiz, y su hermano Antonio Flores, quienes han recibido contratos por más de 250 millones de pesos.

La columna también hace mención de otros beneficiados como Fernando Mendoza Bernal y Régulo Zapata Jaime, pero el más mediático es el senador por Morena, Armando Guadiana.

“Guadiana ha sido financiero importante de campañas de Morena, por lo cual durante un largo tiempo ha tenido un trato respetuoso y agradecido de López Obrador, a quien ha permitido que le condonen adeudos fiscales por más de 2 mil y medio millones de pesos en empresas donde aparece como accionista o representante legal”.

Raymundo Riva Palacio cierra su columna señalando la importancia que tiene controlar la región carbonífera, sobre todo, de cara a la elección para gobernador del próximo año en Coahuila, que es, dice, donde opera la maquinaria electoral más aceitada del PRI.